Una cosa muy natural. Crítica

  

Una cosa muy natural (1973)


Una de las mejores películas gays de la historia

Me sorprendió mucho lo buena que es esta película, sobre todo porque se hizo pocos años después de Stonewall. El retrato de las relaciones del protagonista fue muy conmovedor y real, la profundidad psicológica mucho más compleja que la mayoría de las películas que se hacen hoy en día, gays o heterosexuales. De todas las películas que he visto en mi vida, nunca he visto tantas imágenes hermosas de amor gay masculino que son tan felices. Es como un poema de amor de Walt Whitman que cobra vida. Vale la pena ver la película sólo durante los últimos cinco minutos.


La película es también un increíble archivo histórico. Algunas de mis secuencias favoritas fueron entrevistas hechas con gente en la calle durante el "Christopher Street Pride Parade" de 1973, probablemente uno de los primeros festivales del Orgullo Gay. Muchos de las frases que se dicen podrían haberse dicho hoy. Esta película muestra un trozo de vida al principio de la revolución sexual gay, y al mismo tiempo trata de todos los temas complicados de enamorarse que siguen siendo eternos. El hecho de que muestre la vida antes del SIDA también añade una capa de conmovimiento que los cineastas nunca podrían haber planeado.

Me entristeció ver que las principales figuras de la película, los actores y el director, no hicieron mucho más trabajo cinematográfico más allá de esta película. Espero que sepan que han creado una película muy especial que todavía puede tocar el corazón de uno.



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